sábado, 22 de agosto de 2009
El rompeolas
Cuando era niño, una vecina que cuidaba de mi, me daba dinero cada tanto, no recuerdo si era semanal, quincenal o mensualmente que me daba esas monedas, pero si recuerdo que yo con 10, 11 años ahorraba cada una de esas monedas y cuando alcanzaba una cifra acorde iba con mi madre a comprarme un libro. Esto tan raro para un niño de esa edad, lo hacia por que quería y no por exigencia alguna de mi madre ni nadie, yo no quería juguetes, ni golosinas, ni nada, yo quería libros. Eso era algo que asombraba a todos los adultos, recuerdo como miraban con asombro como ese niño ahorraba cada una de sus monedas para comprar libros y el orgullo de mi madre por tal elección mía.
Un día esto cambio, decidí ahorrar un poco mas y cambiar mi objeto de compra y decidí comprarme un disco, un CD. En cierta forma deje leer y pase a escuchar, esto cambio mi vida, mis intereses pasaron a rondar entorno a la música y lamentablemente para mis intereses de integración social, el rock fue mi estilo elegido, cosa que mis compañeros de escuela y luego del liceo no apreciaban ni les interesaba, aun recuerdo cuando en 6º año de escuela hice una presentación para el resto de mi clase de rock uruguayo y mis compañeros se reían y se mofaban cuando empecé hablar de los estómagos, mientras yo los odiaba por su incultura musical ( ya a esa edad me pasaban esas cosas).
La música ha pautado mi vida de forma cruel y bonita, otro hubiese sido mi destino si en lugar de aquel disco hubiese comprado una buena pelota de futbol Penalty (muy codiciada en esa época y producidora de gran popularidad a quien la tuviera) o alguna otra cosa. Pero fue la música lo que elegí para mi destino, fue lo que me cautivo, destruyo y salvo una y mil veces a lo largo de mi vida y no me arrepiento en absoluto de aquella elección que tome con 11 años.
A todo esto, aquel primer disco que me compre en el verano del 97 cuando tenia 11 años, fue el “20 grandes éxitos” de Los Fabulosos Cadillacs , disco doble que compre con todos mis ahorros y esperanza de que la música fuera mi nueva compañera de vida, disco y banda que a pesar de los años, de cómo han ido variando mis gustos musicales y de lo mal que canta hoy en día Vicentico, me sigue gustando y sigo queriendo con muchos recuerdos de aquellos jóvenes años en que la música lo era todo para mi.
AKA os dejo este recopilatorio doble de los cadillacs
SAludos
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